Recomendaciones desde la farmacia para esta muy buena actividad física, que no está excenta de riesgos
Correr es el deporte de moda, y cada vez son más sus adeptos. Ahora que vuelve el buen tiempo, las calles se llenan de corredores y corredoras que apuran las horas de sol para recuperar la buena forma, perder peso y tonificar piernas antes de la llegada del verano. Se trata de una buena actividad física, pero no exenta de riesgos para nuestra salud, y especialmente para nuestras articulaciones.
Salir a correr con frecuencia puede ser muy beneficioso, siempre que se tomen las precauciones adecuadas y se haga con conocimiento de las propias limitaciones. Es un deporte fácil de practicar que no requiere habilidades especiales, aunque se recomiende una cierta técnica en el movimiento de brazos y piernas, y en la posición de la espalda. Además no es necesario gastar una millonada en equipamiento, pero sí que conviene utilizar un calzado específico para la actividad. Entre sus virtudes, se encuentra el aumento de la capacidad aeróbica, el fortalecimiento de los músculos; la disminución en el riesgo de ciertas enfermedades como hipertensión, obesidad o diabetes tipo 2; la reducción del tejido graso y aumento del tono muscular; fortalecimiento de huesos y prevención de osteoporosis… Además, el deporte favorece la generación de endorfinas, que contribuye a una mayor sensación de bienestar, a mejorar el humor y la salud emocional.
Pero, ¿qué precauciones hay que tener en cuenta desde la farmacia comunitaria, y qué consejos podemos ofrecer a los corredores?
La farmacia comunitaria puede ser una gran aliada para el corredor habitual, acompañarle para reducir riesgos en su actividad y ayudarle a prevenir o superar posibles lesiones.
Fuente: La farmacia hoy